La historia más bonita que jamás se contó sobre Don Ramón y María Antonieta de las Nieves.
Durante décadas, millones de personas rieron con Don Ramón y la Chilindrina.
Pero detrás de cámaras, la verdadera conexión no era la de una pareja cómica, sino la de un padre y una hija.
Uno de los hijos de Ramón Valdés reveló que su papá no solo amaba profundamente a sus siete hijos,
sino que también llevaba siempre consigo una foto adicional: la de María Antonieta de las Nieves, La Chilindrina.
“En las giras, cuando llegábamos al hotel, papá colocaba las fotos de sus hijos…
y al final, ponía la de María Antonieta. La contaba como una más.”
No era solo compañera de escena.
Para Don Ramón, María Antonieta fue como una hija.
Y para ella, él fue como un padre.
La prueba más fuerte de ese amor ocurrió cuando ella estaba en Perú, dando una función,
y a mitad del show le dieron la noticia: Don Ramón había fallecido.
Se descompensó y fue llevada de urgencia al hospital.
El dolor fue tan profundo que no pudo terminar la función.
Años después, ese lazo sigue vivo.
El hijo de Don Ramón lo dice con emoción:
“Ahora yo disfruto de ese amor… porque María Antonieta me ve y me dice ‘hermanito’.
Y nos abrazamos como familia.”
La televisión los unió…
pero fue el amor auténtico el que los convirtió en familia para siempre.
